(Hillary Clinton. Foto de http://blog.yaaqui.com/)El sitio web La Gaceta ha publicado un artículo sobre las cirugías estéticas, tan frecuentes en el mundo del espectáculo y del poder, que reabre la discusión sobre la necesidad o inconveniencia de acudir al bisturí para perfeccionar rostros y cuerpos. Si bien muchas famosas han logrado extraordinarios resultados como Hillary Clinton, a otras les ha ido muy mal como a Jenna Jameson, la reina del cine porno, de 37 años, quien mezcló el quirófano con inyecciones químicas y una desequilibrada alimentación, lo que le produjo anorexia con resultados desastrosos.
Acerca de este tema, los columnistas de varios medios, como Crónica, se preguntan si las cirugías estéticas obedecen a una necesidad o son asunto de moda o vanidad, razón por la cual se establece la diferencia entre éstas y las cirugías plásticas. Las primeras se refieren a las “técnicas” para corregir imperfecciones o modificar los contornos de cualquier parte del cuerpo, y las segundas a la remodelación de cualquier zona corporal afectada por una lesión o deformidad. Es decir que lo estético va relacionado con la vanidad y/o la moda, y lo plástico con la necesidad.
La actriz Julianne Moore es un claro ejemplo de que para mantener bello el rostro y un cuerpo perfectamente modelado no son necesarias las cirugías estéticas, pues a sus 50 años luce como de 30 gracias a sus hábitos de vida: sana y equilibrada alimentación, agua en abundancia, vestidos de manga larga y productos naturales para proteger la piel del sol, deporte, ejercicios, caminatas para estar en forma. Estos métodos pueden complementarse con el uso de las prendas que Vedette ofrece en su tienda para mantener una silueta envidiable.
(Foto de http://www.vedettestore.com/)Repetidamente se ha dicho que antes de ir al quirófano es indispensable preguntarse si es necesario; y, si lo es, practicarse exámenes previos que permitan establecer eventuales riesgos para evitar los desastres padecidos por muchas famosas de Hollywood, la meca del bisturí. El caso de actores de primera línea como Sylvester Stallone es una muestra clara de las consecuencias de las cirugías. Dice La Gaceta “está más acabado que nunca ¿Dónde están sus músculos? Y ahora tiene papada. Ya está pisando los 65 años y tiene la cara como un mapa. Abusar de la cirugía plástica no es bueno”.
(Sylvester Stallone. Foto de http://blog.yaaqui.com/)El anterior segmento fue patrocinado por Vedette, donde encuentras la silueta perfecta que tanto anhelas.
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