Los beneficios de una buena digestión

Una buena digestión es fundamental para tener excelente salud, peso ideal y belleza corporal, pues de ella depende que nuestro organismo obtenga los nutrientes y calorías indispensables para su correcto funcionamiento. Si la reacción química digestiva no es correcta, aparecerán partículas, a manera de toxinas, que desencadenarán consecuencias que, en algunos casos, pueden ser altamente nocivas.

La buena digestión comienza masticando y bebiendo pausada y correctamente los alimentos. Lo ideal es darse un mínimo de media hora para comer, haciendo una pausa entre el primer y segundo plato, y dejando otro espacio entre éste y el postre, pues comer demasiado rápido o con estrés son causas de indigestión y estreñimiento. También ayuda mucho caminar un buen trecho después de cada comida.

Evita comer en exceso y procura evitar la sensación de llenura o saciedad absoluta. Trata de no consumir alimentos muy fríos o muy calientes, platos muy grasos y bebidas con gas. Prefiere beber moderadamente agua en las comidas, que es el líquido más aconsejable para una buena digestión. Elimina de tu alimentación cotidiana el alcohol, el tabaco y el café porque aumentan la acidez, e irritan las paredes del estómago. En su lugar, opta por las infusiones de menta, anís, manzanilla, salvia o hinojo.

Si te sientes hinchada, puede que una digestión incorrecta haya generado retención de líquidos. En este caso, procura que tus alimentos sean ricos en fibra, aunque lo aconsejable es consultar al médico. Recuerda que el exceso de grasa puede ser controlado con fajas reductoras. Vedette tiene en su
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